Sunday, September 27, 2009

Encontré esta rola de la Segnorina Claudia Elizalde en la inexplorada riqueza de Youtube. Y han pasado estas cosas:

1. Me volví a drogar después de mucho tiempo. Un viaje extraño con jarabe para la tos "DMX" y debo decir que estar drogada sola es de lo peor.

2.Se me quitó la tos, el jarabe funcionó, pero me dio gripe.

3. En todo ese rato, alrededor de 6 horas, siempre pensé en él, a quien le dedico la otra rola de Elizalde la de "Soy"

4. No hay depresión, sino una ausencia de mí misma que no puedo explicar. Todo bien.

Wednesday, September 16, 2009

PARA FONDO DE PIOLÍN

Y si me llamas, iré a tu cama. Me quedaré hasta que termine de leerte toda la Odisea.



Espero que así sea.

Friday, September 11, 2009

1. Me invitaron a publicar un cuento en Playboy México. Al final se canceló mi participación por la extensión de mis cuentos. Requieren de ocho mil caracteres, cosa de más de seis cuartillas que no tengo a la mano de porno films o alguna otra sucia aportación. Buh.

2. Me negaron el apoyo en CONARTE por falta de presupuesto. No iré, por tanto, a Varsovia por falta de lana y pues no podré participar como exponente. Doble buh.

3.Me redujeron las horas en el jale, dizque nueva administración. Tripebuh.

4.Cancelado un libro antología entre varios escritores.Cuarto rebuh.

5.No tengo ni alcohol ni drugs para olvidarme un rato de las falta de lana o de cómo insisto en hacer las cosas "bien". BUhshit.

6.I don't want to fix anything.

Sunday, September 06, 2009

Tenía todas las balas
María Montelongo




Tiene 14 años y dos revólveres en las manos. Se sienta en la orilla de una cama de motel y espera algún ataque inesperado. Las sábanas huelen a lo sucedido una noche antes. Lo siente por él y por los recuerdos de sudor esparcidos en el colchón. Le ha gritado y amenazado con algunas balas, debía protegerlo y dejarlo ir. Una maleta con lo pactado y un frío presentimiento de que las cosas estarán jodidas.

Habría escapado con él y dejarlo que compre las entradas a alguna feria de cualquier pueblo, habría amanecido convencida de sí misma cada que él la despertara con un rojo beso, habría tenido sus adolescentes días para decirle "te amo".


Habría escapado junto con él.

La puerta abierta, los revólveres en sus manos, una maleta a un lado de sus pies y la seguridad que sus piernas jamás han temblado por un arma o un montón de ellas.

Le han ido a quitar la maleta sin la paga, le han ido a reventar su cabeza casi quinceñera y han puesto frente a sus ojos el cuerpo sanguínolento de él.


Casi tiembla.

Tiene 14 años y dos revólveres en las manos. Se ha parado frente a una trinchera de hombres, quienes dispararán sin pensarlo contra su cabeza. Lo siente por él, pero ha caído sangrando junto a la maleta que después se han llevado de la habitación.


Debía haber disparado todas las balas sin importar qué. Pero sólo disparó las dos suficientes para escapar junto con él.

Wednesday, September 02, 2009


El amor por una mujer

por
María Montelongo

- La vida pudiera valer menos, sino es por el amor de una mujer. Deja caer el cubilete con un seis de mulas y se lleva un trago a la boca. El líquido arde sobre su despellejada lengua que alguna vez untó sobre la chocha de Martha.


Apuesta con el cantinero su casa, su auto y el bulldog en una carrera de galgos por televisión. Gana y perdona la deuda por una botella de whisky y una conversación sobre mujeres.


-Puedes conocer a una mujer por tenerla en la cama, por conocer a su vieja y astuta madre, por el perfume que usa y por la manera en que te lo pide que se lo hagas; pero no conoceràs nunca el momento en que te va a dejar por otro hombre.


Ojos enrojecidos y miradas a una botella casi vacía: Ella vino por su maleta, empacó, traté de detenerla. Gritó la diabla muerte de sus deseos en el tiempo que estuvo conmigo, lo jodido que la tengo y el olor a bulldog de mis besos.


-Las mujeres tienen formas de decir que no son felices. Pero cuando amas a una, puedes aguantar golpes en la cara, gritos endemoniados,que las botellas de lícor vuelen en dirección a tu pecho, que no le gustes a su madre y que te hagas cargo de sus críos. Pero lo que no puede uno soportar: es que se vaya, cuando la amas.


El whisky se ha ido brindando en cada trago hasta agotarse: Por el cantinero quien es buen escucha, por un seis de mulas, por una carrera de galgos, por la casa y el auto y por una mujer que pudo maldecir hasta la muerte, que despellejó la lengua de su hombre al comerse su cuerpo.