¡Puff!
Rachas...
¿Dónde están las bombas molotov cuando se les necesita?
¿Dónde están las espadas y las hachas cuando se les necesia?
¿Dónde están las malas palabras y las serpientes que salen de la garganta cuando se les necesita?
¿Dónde están las silenciosas muertes cuando se les necesita?
¿dónde?
¡Puff!
Rachas...
Diario de una batalla.
Diario de la segunda parte de la batalla...
Me levanto a las 4 am, sin dormir si quiera... me levanto por levantarme, y esto ya está pasando por lo peor...
Querido Diario.
Debo decirte que esta tarde será genial, he comprado artillería pesada para lanzar desde la mampara a toda cabeza que se ponga en el camino, me encuentro un poco adormilada por tanta pastilla del infierno que se me ha recetado, sigo escrbiendo, de la muerte y sus derivados, se concreta en la mera masacre que dejaré esta tarde, hace bonito sol, uno lindo para dejar cantidad de charcos de sangre...
¡puff!
Rachas del mal.
rachitas pedorras.

Tenía chingos que nadie me preguntaba acerca de mi estado amoroso.
Arthur me preguntó.
A Arthur lo vi una sola vez en el 2006, fuimos al hotel donde quedó de verse con alguien y luego a la presentación, me agrada mucho el libro que leí de él. Por ahora lamentablemente no recuerdo el nombre... pero fue él quien me inspiró el rol literario que estoy tomando...
Od, me dijo que va a l DF, Orfi, siempre me invita y Arthur también, y por supuesto mi amigazo Edgar Ramonet, con quien tengo una cita pendiente en el DF. No sé, he estado pensando que Monterrey ya no es tan mi lugar, no tengo muchas aspiraciones aquí.
Usualmente el estado amoroso me mantiene aquí, el estado que ya no es...
Terminaré de hacer las cosas que debo hacer que me tomarán un año, y me daré a lo formal.
El amor, se me ha cerrado desde bien adentro, no sé cómo contestar en cuanto a mi estado amoroso, sólo puedo decir, que estoy cerrada, que el corazón se me sello con una cicatriz bien grande, que no creo en un "te quiero", sí admiro una palabra temblorosa con todo el fulgor de una mirada enamorada, pero no reacciono ante ella.
Ya, "Saliva y Telarañas" de Arturo Alán Gore. Muy buen libro, editado por Harakiri plaquettes...
No conservo la fragilidad natural del enamoramiento, la he desechado, la he desechado cuando él se me salió desde adentro :

La respuesta arrancábase los hígados uno a uno con afiladas uñas de color adiamantado, hurtadas a los dioses asqueados de ícor al no poder masturbarse con la imagen placentera, inquietante de siquiera una palabra. Ella cuestiona de nuevo y entablamos un diálogo en endecasílabo perfecto, libre de cacofonía. Toda respuesta tiene una pregunta, no se cuál es la mía, dímela intento decirme, no la hay respondí, arráncase entonces sus múltiples ojos de redondeadas pupilas escurriéndole la muestra azul del dolor en sus manos con dedos raquíticos de falanges abultadas. Continuamos así hasta que acabó con su carne, más para reanimarla presté a ella mi mente en con tu recuerdo, ya que las palabras son demasiado viles y vulgares hasta para la descripción más maniqueísta de tu rostro, tus caderas, tus senos, de tu cuerpo incitante a la erección más petrificante; tus ojos que al pestañear me muestran un universo que difiere totalmente del anterior parpadeo, haciendo engrandecer la sensación de insignificante existencia que poseen los olímpicos doses, quienes a pesar de su poder, son ocultados ante la negra noche rasgada con los tonos rojizos del amanecer, ambos manipulados con un solo movimiento de tu cabeza, deteniéndo el tiempo de su órbita con el lazo de tus dedos gastados por la vida de la que has aprendido a defenderte con ellos y a mantenerlos como sólo dedos gastados y no sangrantes, dedos con los que me has sostenido sin temor de caer junto a mí, esos dedos, esos labios humectados de eternidad que podrían ser la panacea de cualquier ser tan puro como la luz, pero que decidieron ser la mía. Al llegar al último paso del borde de la conciencia, sin escudarse en la locura sangrante que divide la mente del crepúsculo, la respuesta con la cual yo dialogaba resucitó sin seguir buscando la cuestión a quien ella resolvía, y me dió su nombre para tí: "Te quiero, no le precede ninguna cuestión, nunca la ha habido, sólo ella en si misma, no hay razón para su existencia, al igual que antes de la luz existió el caos, más la certidumbre que tengo a cerca de ella ocupa el universo entero y no siente las sombras de Tártaro, certeza de tí que con una mirada haces astrar a los brillos, perrar a los ladros, mudar a los hablos, cegar a los miros, buhar a los ulos y movir a los virtos." Lo siento, creo que te devolví tu mensaje por error, más no fue esa mi intención, sino mandarte esto que es lo mejor que pude ajustar a las palabras lo que por tí siento, no tomes en cuenta el contenido (pues no soy un poeta, cuentista ni mucho menos) sino el sentimiento con que lo escribo, te quiero un chingo mi niña, eso no va a cambiar nunca, hasta siempre.

-Sólo sé decir, que los Dioses no tienes más vida para mí... que hasta siempre se hizo hoy... 19 de Julio del 2008.