Thursday, February 14, 2008


Escuché a una argentina decir que el día de San Valentín, fue hecho sólo para los enamorados, ciertamente en la historia, y que se agregó lo de la amistad como un tierno consuelo.

Para los enamorados, para quien vienen en dos, o en tres, o en cuatro por eso del cambio de parejas, les dedico mis pequeños no tan ácidos:

Ácido con maple:
Enamorarse es sonreír, suspirar cuando recuerdas la imagen del objeto de tu amor. Amar, es cuando sabes cómo llegaste a hacer sonreír, suspirar a ese objeto.

Ácido con mango
Sólo con el amor se tapan los errores morales

Ácido con fresas
Deseo, es recorrer los labios de tu objeto deseado, pensando en sus nalgas, Amor, es besar sus nalgas pesando en que sea dulcemente feliz desde sus labios hasta el corazón.

Ácido con chocolate robado de Antonio Gala
El amor es una amistad con momentos eróticos.


¡Feliz y tremendo Día!
Hoy y ayer, bien distante, ayer lloré por la noche, además por la diarrea de dos días seguidos que me tiene harta y porque pensé en el día cuando él se vaya, lo voy a extrañar tanto, como lo hice con mi Dinorha a quien extraño a veces dando tantas vueltas en la cama. Él es como mi muralla o como él se dijo en un post, la torre que cae, mi segundo pilar y uno de mis mejores guías, se va a Querétaro.
Calder me dijo en la despedida, cuando me fui a Canadá. ¡No quiero volverte a ver aquí! No porque no quiera, sino porque es mejor para ti que no regreses. Yo pensaba anoche, en un diálogo imaginario con él.
I: Calder, yo te diría que no quiero volver a verte, pero no puedo, porque sabes que te hablo cada que tengo una idea, cada que tengo un amor roto, cada que termino una creación, cada que tengo frío, cada y cada tiempo donde tengo y dejo de tener fuerzas. Y sólo espero tener la circunstancia precisa para abrazarte fuerte que siempre tengas mi abrazo, te quiero mucho, amigo-hermano. Y espero acompañarte en las calles empedradas de Querétaro.
Hoy, por la mañana no me hizo falta nada, mis niños me abrazaron y llenaron de dulces, chocolates y globos, y de abrazos, que me hacen tanto bien, que me vuelvo tan suave y perfumada como un tibio hot cake.