Monday, March 26, 2007

¿Mande?
Si este verbo deja atónito a cualquier Argentino que haya estado en la oligarquía,
¿Perdóname?
Si esta palabra a los mexicanos nos hace justificar hasta el propio tuétano de nuestra existencia.
Y en nuestro lenguaje somos una breve y extensa historia. Y en nuestro lenguaje verbal, somos una mítica pasión, y en nuestro: mande y perdón…Sólo sé que somos.
Recostada en una sala blanca y con esa luz que acaba los ojos, fue lo que pasé en una habitación de urgencias esta mañana, con esas chichillas de un electrocardiograma y con esas pinzas en mis pezuñas, en las cuatro; pensé que parecía Cristo o su opuesto actual, Giorgio Bongiovanni, como escuché en una entrevista del cadáver de Eugenio. ¿Cómo voy a pasar la ida o la vida en este mundo, si el corazón me duele?

Sé de gente que se golpea la cabeza contra la pared
por dolor,
de estar vivo. Y presenciar esta involución…
Yo me he golpeado la espalda,
porque no puedo morir
si la gasolina se me acaba,
Si el motor se apaga y,
la memoria lo sostiene.
Aun me queda barbacoa
Por comer
Aun hay pezuñas que tocar,
Imágenes que robar,
Lecturas que hacer,
Ignorancia por romper,
Aun si encuentro mi Larousse,
Oculto entre una montaña de calzones y condones,
Aun, un A b c, por empezar, aun si mi aparato no funciona bien.
Esta mañana en urgencias, no es esta tarde, esta Noche, esta misma criatura que con o sin malestar, ve evolución en la humanidad.
Dicen que uno puede vivir con la tercera parte de su corazón… vamos a ponerlo a prueba.

Wednesday, March 21, 2007

Como un escrito español, principios del siglo XX, empiezo a adoptar todas esas frases, enunciados, y figuras que ya no son, sino el cadáver de la metáfora. Mi corazón se mantiene abierto como una granada y está madurando, ansioso como una ciudad en fiesta, y mi espíritu grita por estar “sucia de besos” y “rumores calientes”. Porque le necesito “verde carne”, “verde pelo”,”verde que te quiero verde”. Y Necesito tu ser, cerca, más cerca, para portarme como quien soy: Fuego entre tus piernas, llamas revueltas para que llames, mi nombre entre tu pasión de aire, que bate lirios, nardos, y soledades, que furiosas aun muerden, por dejarme en eterno frío. Y aunque mantenga mi granada de “pecho dormido” vive en el vientre, amor sin tremendo olvido, por tu maldito recuerdo de pirata marino. Y no soy española, mucho menos de Siglo XX, soy una cabrona, con ganas de arrancarte, joderte y aniquilarte el pinche y puto pajarito. Y me he dejado de sentir como un escrito de principios del Siglo XX, cuando lo escuché decir: “ y no quise enamorarme/porque teniendo marido/ me dijo que era mozuela/ cuando la llevaba al río.” Y mi granada del pecho se me fue a la mano, para pateartela cuando me dijiste que no habías dado el pito.


Agradecimientos profundos a García Lorca

Monday, March 19, 2007

Últimamente me paso los días viendo los videos de Shakira en Noruega, en Finlandia, en Rusia, en Toronto, en Turquía y demás partes del mundo…. Y sigo pensando que tiembla el español en las lenguas extranjeras, y me emociona el idioma que hablo. Recuerdo aquella vez cuando trabajaba con las mininas brasileñas, recuerdo esa confesión en Toronto en la casa de la familia indú a la que le limpiábamos las alfombras. Yo recogía las pelusas con la aspiradora, mientras Sasha me pedía que le enseñara español. ¿Español? Realmente una chica con residencia por padre canadiense quería aprender español, viviendo en un país semiextranjero para ella, donde se habla inglés, ¡cuál era la necesidad más próxima de Sasha, sino sentirse parte de Latinoamérica! Sasha Centauro, parte Canadá, parte Brasil. Se mantenía siempre en el barrio brasileño hablando portugués, pillaba muy poco el inglés y quería aprender español, tal vez por algún chico, un vecino, una fiesta, una herida con la demás masa hablante en Latinoamérica. Pero Sasha necesitaba ese espíritu que la mayoría de los Americanos del sur, centro y México tenemos.
Sasha me generó el entusiasmo por mi rabia silábica, por repetirle todo a Mr. Mark como niño pequeño y dibujar uno y más animales, cosas, objetos, etc., de la forma más básica y pedagógica para que me entendiera y aprendiera: repetición, oralidad, mnemotecnia, lógica, razonamiento. Proyectándolo al caos, para que partiera su conocimiento en partes mínimas y las volviera a reunir al final de la clase. Muchas veces no lo logré, pero cuando había comunión, era tan embellecedor. Actos como el de Shakira, son un mensaje (al menos para mí), siempre Sasha cantaba la canción de octavo día de la cantante en cuestión, cantaba no en la versión brasileña, sino en español, y sino sabía, tarareaba y se ocultaba en el sonido universal, pidiéndome después ayuda.

Monday, March 12, 2007

A S., mi vikingo no mío, con lo que mito es, mi infinito amor:

Mi garganta necesita un buen pasajero, ni una palabra, ni un silencio, ni un eco con maletas o sin ellas para viajar ligero; mi garganta necesita Tequila para acompañar unas lágrimas sin color, porque no recuerdo la sangre viva con la que te quise. Y te fallé en no ser tan masoquista, porque si tú morías, yo iría en tu barco vikingo junto a tu cadáver porque nada de caso tenía seguir en la orilla del mar. Y como bruja ardería con el mismo fuego de leña que tu hermoso cuerpo. Y en tu partida te dedico mi garganta con un único pasajero, mi último trago por ti. Porque he vuelto a sentir la sensación de ansiedad, de temblor en el corazón y la alergia del mundo feliz, una sonrisa que él pone en mis labios.

Sunday, March 11, 2007

¿Qué hace a una mujer como yo sentirse triste?
Indudablemente, el quejido del pasado, donde conocí el amor de un él.
Y me metí en los libros para no morirme, y me morí antes que tú,
Y vivo, vivo vivo, cuando mis manos tocan las teclas, y me siento que la herida no importa y vivo, vivo, vivo sin un mundo gris, y sin ti, un él, que me abrió las manos para dejarme ir, con la herida que nunca cierra.

http://www.youtube.com/watch?v=Qslnsf2qYj8&mode=related&search=
Ese ruta 23, me debía historias:
Subí como otras veces, tambaléando, buscando en mi cabeza un arsenal de números telefónicos para hablarle a algún pedazo de humanidad para que me ayudara a encontrar algo de fraternidad; ya que he andado un poco muerta y triste, como siempre la fatalidad se acuerda de mí y obviamente los amigos parecen gente lejana e irreconocible, tengo una lista de odio con puros nombres que ni recuerdo, subí y me sujeté al asiento, junto a la ventana. Vi que el chico de enfrente de mi asiento volteaba raro, torcía su cuello como la chica del exorcista, no esperaba una mole verde que saliera de su boca, pero me esperaba un gran golpe para que mi cerebro quedara embarrado en la ventana y por fin me liberara del espiral de necesidad de afecto, y deseaba que aquello se convirtiera en la fiesta de un chivo, con miles de gotas de sangre, como la fiesta de Cristo crucificado y yo tirando golpes en mis últimos minutos, supongo que imagino eso para no decepcionar a la familia, que al menos supieran que me defiendo cayendo en las faldas de la muerte en los últimos momentos, supongo que es para despistar mis necesidades de cadáver viviente. Aquel chico volteó por tercera vez y levantó su lengua para preguntarme ¿oye tu te peinabas con dos trencitas, verdad? Un ojo viviente, que me miraba por las mañanas, alguien que conocí en el ruta 23, una historia alterna en el camión, ya extrañaba coincidir con desconocidos que me han observado desde días, meses, y que tienen historias alternas de gente que conozco: Trabaja en el Norte y leyó aquella crónica urbana donde Mario Anteo me nombró en su espacio editorial, por aquella cosa de la lectura de la Naranja Mecánica, ¡jamás pensé que eras tú!, dijo, y nos fuimos hablando como quien come un fideo, tan fluido y sabroso.
Y soy un cadáver platicador que alterna con personajes del ruta 23, que me inyectan un tantito de vitalidad, de sangre y de penas.



y en la muerte alcanzo la vida,
nómbrame el tatuaje en tu lengua
y estaré ahí

Thursday, March 08, 2007

Te han robado la sombra, mi querdo.
para la cura, un café revolcado con mezcal
chapulín colorado, para la yema de los dedos
antes de raspar el corazón.
Te han robado la sombra
para la cura, pasión de soledad, amor.
cobija de hoja de tamal en estrella fría
y ojo de nopal, con espinas pa' aguantar la realidad.
Porque en el desamor, te han robado la sombra, corazón.


Pa' mi Oaxaca y molitos querido
En ocasiones los Padres Nuestros se pudren en mi boca,cuando termino la oración me doy cuenta lo que le he pedido al Padre Santo. Le pido la Muerte.

Sunday, March 04, 2007

Le dejó las piernas abiertas, para que entrara la primavera, una vez ahí, con la caricia de miles de coloridas mariposas, la dejó encerrada en un musgoso lugar. Preñada por la primavera jamás sintió un alfiler de soledad en su rosada piel y durante nueve meses bajo un lugar pequeño, olvidó cómo era la luz, la oscuridad la cegó, pero no importaba porque aun había calor de sol, un niño en su vientre, agua de dulce río en su placenta, movimientos de alas en su ombligo, cariñoso aroma a flor. Un niño hijo de la primavera era lo que él esperaba, un hijo que lo alimentara y lo hiciera hermoso, sano, orgulloso de estar vivo, algo que lo dejara lejos del inframundo. El niño nació tan fuerte como el trueno de entre las amorosas piernas de su madre, el niño le iluminó los ojos ciegos, blancos como el aire de invierno, un niño tibio como arena en la playa y piedra de río. Y una madre perdiéndolo bajo los brazos del nefasto deseo de él.
Él me bajó la sangre que se encendió, a él le dicen el higo, porque echa leche por los pezones. Aun no soy una psicópata, pero sí tengo demasiada violencia y la siento acercarse cada día más, es una violencia externa que se expande sobre todos nosotros, díganme que tengo lobotomías cerebrales, pero algo está ocurriendo…
La rabia, es la agresión que sientes ascender por la mitad de tu pecho a la cabeza. He sentido esta rabia como una enfermedad, soy medio funcional en la sociedad, y la veo como mi cura, pero hay una fuerza externa que no comprendo y que nos afecta, a veces soy como un perro, con la sensibilidad animal, a veces siento cosas y sucesos en mi cabeza que son acertados. Algo pasa y hay que estar preparados:
Para el dolor que te tira en espiral, olvidar que uno es el único que lo siente y verse apoyando a la otredad.
Para la envidia, amar lo que uno es, olvidando lo que el otro alcanza a hacer.
Para el desamor, paciencia porque hay un futuro.
Para la soledad, dejar que no se siga expandiendo el egocentrismo, porque en ella, en la soledad, siempre hay buenas respuestas.
Para la decidia, valor, valor, valor, que se resume en el conocimiento y acto de hacer.
Tengo una violencia interna y hay otra afuera, y aunque me falta tiempo para respetarla, comprenderla y manipularla, el temor de no llegar a salir librada no me detiene a dejar de investigarla.

Thursday, March 01, 2007

Son curiosas las conversaciones por msn, a veces ni conversaciones son, la mayoría de mis contactos se pierden en el vicio de entrar, aun estando ocupados para contestar, suelen actuar como divos y divas, a excepción de algunos conocidos y familiares. Y yo que pensé hace más de 3 años que el msn uniría a todos en una gran plaza virtual para charlar y chismorrear. Ahuevonada decepción.