Thursday, March 17, 2005

La gordita impúdica

No lo pensé hasta el siguiente día. Argelia me dijo que el juez estaba muy triste, recuerdo haberlo visto solo en su carro, con la mirada ajena, vacía, hasta me pareció un viejito muy cool, hasta pensé que era de familia. Yo siempre veía a su hija desde mi ventana, ella siempre hacía ejercicio desnuda y conectaba un foco rojo en su habitación. Cuando veía la muy particular silueta que se formaba por la luz del foco, sabía que estaba haciendo lo que sabía y la miraba con el ojo de mi cámara. Tengo una grabación de su torso desnudo. Tenía tiempo que no la veía, y ahora menos. En la mañana reaccioné lo que me dijo Argelia, la hija del juez, la gordita, la gordita impúdica como la etiqueté en cada casete, murió el 19. Un mes después de mi cumpleaños. Sé que la muerte andaba por aquí, pero no sabía que siempre sí se había equivocado de habitación. Me dio miedo la muerte, la de la gordita impúdica, la voy a extrañar.